En algún momento fue una promesa de crack, después de transformó en una realidad de palo y mucho después empezó a incursionar en politica. Llegó a presidente del club y quedará en la memoria, como una lacra más...
No solo no hizo NADA en los cuatro años de su ¿mandato?, sino que fue un obstáculo permanente para el crecimiento del Verde. A modo de resumen recordaremos que en la penúltima fecha del Argentino B 04/05, cuando Germinal derrotó a Huracán de Comodoro, al Verde le terminaron quitando los puntos por mala inclusión de Armando Mansilla. ¿Tan dificil era escribir un par de nombres en una planilla? Después, perdimos los puntos de un partido de liga contra Brown ¡porque no llamaron a la policía!
¿Más? Cuando al Verde lo re invitaron al Torneo Argentino B en el 2005, Pablito y sus secuaces (lease Meoqui, Bocha Flores, entre muchos otros) se negaron aduciendo que no era el momento, que no estaban preparados y que querían armar un equipo con tiempo de trabajo. Pero para el Argentino C, que empezó seis meses después, los refuerzos llegaron unos días antes de que empiece la competencia. ¿Y el trabajo? ¿No era preferible armar ese equipo seis meses antes y participar de una categoría superior?
Y un poco más. En más de una oportunidad los jugadores debieron viajar miles de kilómetros ¡en auto!. ¿Para qué se utilizaron los cientos de miles de pesos que el gobierno les entregó? ¿Para cambiar las canillas de los vestuarios?
No conforme con sus fechorías, una vez retirado para seguir su carrera como golfo de Adrian López, Martínez se niega a presentar los balances económicos que permitirían que Germinal vuelva a tener una comisión directiva (sólo hay Subcomisión de Fútbol hace cuatro meses). ¿Por qué lo hace? Es claro, no tiene ni la más remota idea de como justificar toda la plata que recibió de subsidios que se robó.
Gracias Pablo, no vuelvas nunca.
0 comentarios:
Publicar un comentario